Un estudio clínico de vida real realizado en Indonesia muestra que la vacuna de la empresa china Sinovac Biotech protegió a los trabajadores de la salud en un 98% de la muerte y al 96% de la hospitalización desde los siete días después de la segunda dosis.
De confirmarse, estos resultados son alentadores; por un lado, porque hasta ahora la vacuna llamada CoronaVac ha tenido resultados disparejos en los distintos ensayos clínicos y se considera mucho menos efectiva que otras vacunas aprobadas, y por otro, como señaló un funcionario del Ministerio de Salud de Indonesia en conferencia de prensa, porque muchos países en desarrollo dependen de esta vacuna, entre los cuales está México, donde ya se está aplicando.
CoronaVac ha sido cuestionada por la disparidad de sus resultados, ya que mientras a finales de diciembre del año pasado se reportó que una prueba clínica realizada en Turquía daba una efectividad del 91.25% en la prevención de la enfermedad sintomática, el 15 de enero un ensayo similar en Brasil reportó que la efectividad era del 50.4 por ciento.
Incluso en la misma Indonesia, un ensayo con alrededor de 1,600 personas concluyó que la vacuna tenía un 65.3% de efectividad, lo cual se consideró suficiente para que el 13 de enero el país comenzara su programa nacional de vacunación con CoronaVac. Indonesia es la única nación en el mundo que está inmunizando primero a la población joven para que pueda salir a trabajar.
Las nuevas cifras, obtenidas con el seguimiento de 128,290 trabajadores de la salud en la ciudad de Yakarta, no son estrictamente comparables con las anteriores, pues se refieren a la enfermedad grave y a la letalidad, y tiene una muestra muy específica y no azarosa que no se puede trasladar a la población en general.
Además, este nuevo estudio tampoco significa el fin de la controversia, pues sus resultados sólo han sido presentados en conferencia de prensa, e incluso un portavoz de Sinovac Biotech en Beijing se negó a comentar al respecto con la agencia Bloomberg hasta “tener más detalles”.