A un año del primer intento fallido, la que algún día llamamos Glorieta de la Palma estrenó un nuevo ahuehuete; se trata de un ejemplar de 20 años de edad y 12 metros de altura.
El ahuehuete fue donado por los Viveros Regionales y Vivero Los Encinos, y suplirá al primer árbol de la misma especie que no soportó las condiciones del suelo y tuvo que ser retirado.
Y es que después de notar que el árbol plantado sobre Reforma en junio de 2022 no manifestaba buenas condiciones, la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) anunció el pasado 9 de marzo que plantarían otro ahuehuete en su lugar.
Pasaron cerca de dos meses desde entonces, hasta que en la madrugada de este viernes se realizaron los trabajos para la plantación del nuevo árbol, a cargo de expertos viveristas, sociedad civil e instituciones académicas.
¿Qué pasó con el otro ahuehuete?
A bordo de tres camiones plataforma, la mañana del pasado 11 de marzo la Sedema reitró el árbol de la exglorieta de la Palma, tras señalar que “no se adaptó a las condiciones climatológicas”.
El ahuehuete tuvo que regresar al vivero de Xochimilco –de donde salió en junio de 2022– para que expertos intenten recuperar su salud; pues afirmaron que seguía vivo porque presentaba raíces en crecimiento.
Vale la pena recordar que el primer ahuehuete sufrió dos choques de automovilistas que perdieron el control de sus vehículo y se impactaron contra su base; pero –a decir de la Sedema– fueron las condiciones del suelo y el clima las que terminaron por impedir su adaptación.
El ahuehuete que ya se retiró también se convirtió en el “guardían” de las y los desaparecidos; pues tras ser plantado sobre Reforma, familiares de víctimas de desaparición colocaron un tendedero con las imágenes de sus seres queridos y renombraron la que un día fue la Glorieta de la Palma como la Glorieta de las y los desaparecidos. EJ
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