Cuatro años después de la última vez que consiguieron la gloria doméstica, el combinado azulgrana vuelve a reinar España. Ha sido el equipo más regular, constante y al que menos se le notó disputar un Mundial a media temporada.
El pasado verano, la directiva apostó por apalancarse para proveerle a Xavi un poderío económico competitivo y formar una plantilla ambiciosa. La incertidumbre generada por comprometer gran parte del patrimonio del club ha dado sus frutos a corto plazo, pero a mediano y largo, las consecuencias están por verse.
Los catalanes han mejorado notablemente en defensa durante esta campaña, registrando sólo 13 goles encajados hasta ahora, lo cual ha sido clave para mantenerse en lo más alto de la clasificación. Desde la partida de su ídolo Leo Messi, el Barcelona no había contado con un jugador de la talla de un “Pichichi”, pero esta vez Robert Lewandowski no ha decepcionado. El delantero polaco suma 21 anotaciones en 30 partidos, seguido de cerca por los 17 de Karim Benzema.
A pesar de las múltiples humillaciones en Europa, la “transformación” del Barça está empezando a tomar forma cada vez más. Los liderados por Xavi se han convertido en un conjunto que puede enfrentarse a cualquier equipo, y al ganar la Liga por encima del actual campeón de Europa, el Real Madrid, demuestran que ya no se les puede faltar al respeto.
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