Washington, con más militares que las misiones en Siria o Irak

27 de Diciembre de 2024

Washington, con más militares que las misiones en Siria o Irak

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Para la
investidura de Joe Biden habrá 15 mil integrantes de la Guardia Nacional y 10 mil agentes de seguridad

La seguridad va en serio: para la toma de posesión de Joe Biden como presidente se han desplegado más de 15 mil miembros de la Guardia Nacional, una cifra que hace ver pequeñas las operaciones militares de Estados Unidos en Siria, que contó con 4 mil 450 elementos, o las realizadas en Irak, con 6 mil efectivos. Para este miércoles el número de personas dedicadas a la seguridad ascenderá a los 25 mil.

A los miles de miembros de seguridad que se han instalado se suman vehículos blindados, patrullas, arcos detectores de armas, francotiradores apostados en las alturas y barricadas que dejan 12 kilómetros cuadrados cercados y bajo la más estricta vigilancia que ha visto el corazón político del país.

En total se han establecido tres perímetros: uno vigilado por la Guardia Nacional, uno más delimitado por vallas de hormigón y el último que resulta impenetrable a pie.

El transporte no ha sido olvidado, puesto que 13 estaciones de Metro se han cerrado y así permanecerán hasta el jueves 21. De igual forma, los comercios permanecen solitarios y tapiados.

Pero la vigilancia no se ha limitado a Washington; a lo largo de todo el territorio estadounidense se han instalado miembros de la Guardia Nacional para proteger los capitolios en otros estados.

Las amenazas de grupos de derecha radicales no se han desoído y el gobierno estadounidense ha puesto en marcha su imponente sistema de seguridad para garantizar una toma de posesión sin hechos violentos como los registrados el pasado 6 de enero.

Y aunque es habitual desplegar elementos de seguridad en las tomas de posesión de un presidente, en esta ocasión el número de miembros ha llegado a un nivel histórico, toda vez que las amenazas de nuevas revueltas han sido confirmadas por el FBI. Ni siquiera el espectáculo musical que amenizará la entrada del nuevo presidente se salva, ya que únicamente se podrá disfrutar por televisión, sin excepciones.