Los constructores de automóviles alemanes Volkswagen, Audi, Porsche, BMW y Daimler formaron un cártel desde los años 1990 y se pusieron de acuerdo en secreto sobre las emisiones contaminantes de los motores diésel, entre otras cuestiones, afirma este viernes la revista alemana Der Spiegel.
“La industria del automóvil alemana se puso de acuerdo desde los años 1990 en grupos de trabajo secretos sobre las técnicas utilizadas en los vehículos, los costes, las subcontrataciones, los mercados, las estrategias y también la disminución de sus vehículos diésel”, escribe la revista.
Der Spiegel se basa en un documento que el grupo Volkswagen envió a las autoridades de la competencia en julio de 2016 y que constituye “una especie de autodenuncia”. Daimler habría hecho algo similar, según la revista. Contactado por la AFP, el grupo Volkswagen (que comercializa marcas como VW, Audi y Porsche) no quiso comentar la información, como tampoco lo hizo Daimler (Mercedes-Benz) ni BMW. La oficina alemana de la competencia no estaba disponible de inmediato para comentar la información. Según Der Spiegel se crearon unos 60 grupos de trabajo que reunieron a más de 200 empleados de las compañías para estudiar cuestiones como el desarrollo de motores diésel y gasolina, los frenos o los precios de los vehículos. En 2015 salió a la luz el llamado ‘dieselgate', la revelación de que Volkswagen trucó once millones de sus motores para hacerlos parecer menos contaminantes de lo que en realidad eran. Desde entonces han salido a la luz otros casos similares de constructores alemanes, como Daimler. (Foto: bazonline.ch). DA