La noche del martes despegó desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) un avión de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) cargado con 100 toneladas de ayuda humanitaria hacia Turquía.
Ha pasado más de una semana desde el terremoto de 7.8 grados que ha dejado cerca de 40 mil muertos en Siria y Turquía; sin embargo, los trabajos de rescate y atención a las víctimas continúan, por lo que diversas naciones siguen enviando personal y viáticos a los afectados.
En este sentido la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) confirmó el envío de alimentos, cobijas, colchonetas, casas de campaña, generadores de luz, insumos médicos, ropa y artículos de higiene personal.
Para supervisar el despegue del avión acudieron el embajador de Turquía en México, Ilhan Kemal Tug; la directora ejecutiva de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Laura Elena Carrillo, y el general brigadier de Estado Mayor, Salvador Lorenzo Bautista.
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Esta respuesta del Gobierno de México responde a la solicitud de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), quien pidió a sus miembros destinar “sin demora” 397 millones de dólares para ayuda de Siria y Turquía.
De acuerdo con el secretario general de la ONU, António Guterres, cinco millones de sirios necesitan atención médica, refugio, medicinas y alimentos.
Según datos oficiales, más de 35 mil muertos se contabilizan en Turquía debido al derrumbe de 11 mil edificios; lo que derivó en el envío de equipos de rescate de todo el mundo, incluyendo 150 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Marina y Cruz Roja Mexicana. EJ
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