La complicada situación financiera que enfrenta Petróleos Mexicanos (PEMEX), a cargo de Octavio Romero Oropeza, ha despertado más incertidumbre y preocupaciones entre sus proveedores, con quienes en su mayoría tiene millonarias deudas. Y es que si bien desde que inició la actual administración su situación financiera ha sido complicada, esto se vino a agravar en estos últimos meses, y es que, debido a la falta de presupuesto, el pasado 1 de diciembre, la empresa productiva del Estado canceló el procedimiento de Adjudicación Directa 2023-258-PMX_SA_PC_GCSS-SASSO-AD-N-A para el arrendamiento de equipo de cómputo.
Cabe señalar que, en mayo de 2020, en medio de la crisis de COVID-19, PEMEX publicó el oficio PEP-DG-SPRMSO-113-2020 con el cual canceló contratos de manera temporal de siete embarcaciones ante la falta de recursos económicos. Parece que PEMEX ya no siente lo duro sino lo tupido, pues su complicada situación financiera también la ha llevado a recortar su inversión, muestra de ello es que durante el año pasado en el Campo Ixachi, uno de los prioritarios, redujo su inversión en 20 mil 684 millones de pesos, por lo que sólo gastó una cuarta parte de lo que había programado.
Finalmente, ante el retraso en el pago a sus proveedores, algunos ya están tomando cartas sobre el asunto, tal es el caso de Ouchi Energy que inició un proceso de solución de controversias debido a un impago de aproximadamente 127 millones de dólares. Además, se rumora que las empresas internacionales, a las que PEMEX adeuda millonarias cantidades, también están pensando en hacer algo, pues algunas como Fieldwood Energy y Petrobal, que juntas debe 90 millones de dólares. A la estadounidense Schlumberger debe 474 millones de dólares y a Halliburton adeuda 529 millones de dólares. Nos cuentan que, en caso de no mejorar esta situación, los proveedores de PEMEX, tanto nacionales como extranjeros, ya se piensan dos veces en mantener sus negocios con la empresa, al tiempo de mandar un pésimo mensaje de certidumbre legal para invertir en un sector que por décadas ha sido estratégico para la economía nacional. Grave situación.
Plastiqueros, lo que viene
Lo que viene para el sector del plástico en México, así como en el marco del TMEC y Nearshoring, se resaltará el 21 de febrero en el foro Perspectivas que organiza la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (ANIPAC), presidida por Aldimir Torres y dirigida por Raúl Mendoza, de la mano de M.Holland, Nexeo Plastics, BYK additives, Braskem Idesa, Iberdrola México, Grupo Quimisor, Polnac, Omnigreen y Zwick Roell. Uno de los desafíos que persiste para el gremio de más de 5 mil 200 empresas es en inversión, y es que, enfrenta la necesidad de apostar por materiales más ecoamigables, reduciendo su huella de carbono, consumo de agua y energética, además de adoptar procesos más sostenibles, entre otros; aunado al desorden en regulaciones pues suman cerca de 260, mientras que la Ley de Economía Circular y la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, siguen inmovilizadas.
Voz en Off
Las palabras de José-Oriol Bosch, director general de Grupo Bolsa Mexicana de Valores, sobre que las empresas mexicanas prefieren hacerse públicas en Estados Unidos, deja claro que el mercado bursátil mexicano ya no es atractivo, más allá de los esfuerzos que se han hecho por incentivar el mercado local. Pésima noticia y más viniendo de un ejecutivo de ese nivel. Mal mensaje además, porque se debería trabajar con el gobierno federal en impulsar número de inversionistas y participantes del mercado, así como ellos reconocen, el impulso a la cultura y educación financiera….
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