La resolución a la violencia e inseguridad que se vive en las comunidades tendrá que ser local, con la participación de la ciudadanía ante un sistema de justicia desbordado sostuvieron participantes en el Diálogo Nacional por la Paz.
Al presentar programas exitosos en donde la coordinación de autoridades estatales, municipales y la ciudadanía han logrado disminuir la inseguridad, se manifestó que las comunidades tienen métodos restaurativos eficaces que son poco conocidos.
En estos métodos se busca la verdad, para eso se investiga, y se construyen acuerdos entre las partes para reparar el daño a la víctima y reeducar al victimario”. Así lo muestran los reconciliadores tseltales en Chiapas, los juicios en las asambleas rarámuris o los procesos de justicia cívica de varios municipios del país.
Por lo que es importante identificar y formar a líderes vecinales, comunitarios, escolares o familiares en mediación comunitaria, para fortalecer las habilidades en la transformación de conflictos y desactivar posibles brotes de violencia.
Es necesario enfocar esfuerzos ciudadanos en crear y consolidar redes de apoyo y cuidado mutuo; explorar mecanismos alternativos de resolución de conflictos como la mediación y la justicia restaurativa que permita reintegrar a quienes han infringido la ley; fomentar la colaboración y el acercamiento entre las comunidades y sus policías municipales.
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También se destacó en el Diálogo que hasta ahora se ha apostado por el encierro como la única vía posible para sancionar y luego reinsertar a los responsables de las conductas delictivas, así como para intentar disuadir a otras personas de no cometerlos.
“Los resultados los tenemos a la vista: no hemos logrado reinsertar a los primeros, pero tampoco disuadir a los segundos. Ello a pesar de que las penas continúan elevándose a límites fuera de toda proporción, como es el caso de quienes se encuentran purgando sentencias de 300, 500 o hasta 700 años”.
Es necesario, por tanto, pensar en un sistema que, siempre que sea posible, no segregue a las personas que delinquen de sus comunidades vitales. Ante el fracaso de los modelos vigente, como es la justicia restaurativa, que involucra tanto a la víctima como al victimario y se preocupa por restablecer el tejido social y reparar los daños ocasionados por el delito.
Entre los ejemplos de programas exitosos para reducir la delincuencia, Vicente Ramírez García, director general de Seguridad Ciudadana en Nezahualcóyotl, Estado de México expuso que desde el 2003 se implementó
un modelo en el que se territorializó a la policía, éste sólo se interrumpió unos años y se le ha dado continuidad.
En éste se formaron los cuadrantes, los sectores y las zonas, y se creó la policía vecinal de proximidad. Actualmente se tiene una fuerza de reacción y además una fuerza la policía metropolitana que se encarga de blindar todas las colindancias con otros municipios y las alcaldías de la Ciudad de México.
Además, se han creado más de 11,500 redes vecinales en las que se generan denuncias, quejas o peticiones, con esta proximidad social se logra que los ciudadanos se involucren en temas de gobierno y de la policía.
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“Creemos y apostamos a que hay salida a la inseguridad bajo esta estrategia ha venido a la baja el robo de vehículo y el homicidio” aseguró.
Otro ejemplo lo detalló José Martín Doria Mata secretario de seguridad pública de San Nicolás de los Garza, Nuevo Léon “le apostamos a la tecnología tenemos un sistema de cámaras inteligente con software detectores de placas y reconocimiento facial”.
Se tiene una ciudad inteligente en la que se tienen comités de seguridad en todas las colonias integrados por los propios vecinos, se creó también un chat ciudadano de seguridad de cada comité. Además,
hay
un chat con todos los mandos de la colonia y los directores y el C4 .
“Casi todos los municipios que involucran a la ciudadanía van a tener éxito, ellos son tus buenos halcones en calle. Hay unos que son obsesivos pero bueno estamos para atender somos servidores públicos. La participación ciudadana es clave para el éxito” aseguró.
Juan Carlos López subsecertario de seguridad pública de Saltilo, explicó que se constituyeron mesas de seguridad regionales con los tres órdenes de gobierno, se capacitaron policías a quienes se les dieron incentivos y se logró disminuir la incidencia delictiva.
Además, los modelos proximidad social y justicia cívica han logrado prevenir el delito y son un parteaguas para la seguridad.
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