Mientras en Dinamarca los casos pediátricos de hospitalización por virus sincicial respiratorio ya casi duplican los de temporadas invernales anteriores, aun cuando estamos apenas en noviembre, en Canadá y el norte de Estados Unidos, aumenta el número de reportes de hospitales saturados.
De acuerdo con información del Statens Serum Institut danés en las temporadas invernales desde la de 2015-16 a la 2019-20 hubo entre 2 mil 200 y 4 mil 500 casos y entre mil 300 y 2 mil 500 admisiones hospitalarias debido a este virus; sin embargo, la información actualizada al 23 de noviembre, en este 2022 ya ha habido 7 mil 388 casos confirmados, 2 mil 969 admisiones y 53 muertes en Dinamarca.
Además, este acelerado aumento de los casos inició alrededor de la semana epidemiológica 35 cuando en otros años lo ha hecho después de la 48.
Sin tener registros agregados como los daneses, en Canadá y Estados Unidos se están viendo situaciones similares que están saturando los servicios de salud pediátricos. Por ejemplo, el Surrey Memorial Hospital de British Columbia, es un inmueble con capacidad para dar 72 consultas pediátricas, pero en estos días está dando un promedio de 250 y atendiendo a algunos en los pasillos, pues no tiene camas ni habitaciones suficientes.
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Una situación similar se vive en Boston, Estados Unidos, donde prácticamente no hay camas pediátricas disponibles en los hospitales en un radio de 320 kilómetros.
Actualmente no hay vacunas ni tratamientos para el virus sincicial respiratorio. Sus síntomas, en los adultos no pasan de ser los de un resfriado, y en la mayoría de los niños suelen ser tos, congestión, secreción nasal y fiebre; sin embargo, en algunos casos puede provocar inflamación de los bronquios y serias dificultades para respirar.
En Dinamarca, más de la mitad de los casos se han dado en los menores de cinco meses y prácticamente no ocurren después de los cinco años.
De acuerdo con el virólogo Andreu Comas, experto en este virus, aún no se sabe las dimensiones que podría tener esta ola en México, por lo que se recomienda tener especial cuidado con los menores de dos años.
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