Cada día de junio se registraron en el país un promedio de 20 investigaciones por violencia de género y más de 900 casos de violencia familiar. Ambos delitos registraron los máximos históricos en su incidencia de los últimos ocho años y seis meses.
La actualización del informe sobre la violencia contra las mujeres que elabora el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) indica que ambos delitos repuntaron no sólo entre mayo-junio, sino también respecto al acumulado de las carpetas de investigaciones al primer semestre del año.
En el caso de la incidencia de violencia de género en todas sus modalidades el incremento fue del 11.8 % en el último bimestre y de más del 26 % respecto al primer semestre de 2021. En el caso de las indagatorias por violencia familiar, es uno de los delitos que desde el inicio de la pandemia en 2020 se ha mantenido al alza, el aumento fue de 4 % entre mayo-junio y del 7.7 % al comparar la primera mitad del año.
Sin embargo, no fueron los únicos delitos que alcanzaron récord o que aumentaron en su incidencia. De enero a junio la cantidad de mujeres víctimas de homicidio doloso y feminicidio reflejan disminuciones del 6.6 y 15% respectivamente. No obstante, ambos crímenes repuntaron en cantidad de víctimas respecto a mayo en un 5.7 y un 28.5 % cada uno.
La cantidad de mujeres víctimas de corrupción de menores, al igual que la violencia familiar y de género, también alcanzó la mayor cifra desde 2015. Con un aumento del
27 % en comparación con las víctimas de mayo, cada día del mes anterior se registraron al menos seis víctimas de ese delito y en total sumaron 195.
¿Cifras claras?
Entre mayo-junio, la cifra de mujeres víctimas de trata, de lesiones dolosas, así como de secuestro reflejaron incrementos de 68, 6 y 70 % respectivamente. Aunque llama la atención las variaciones en la incidencia de víctimas de secuestro de los informes de mayo y junio, lo cual ha sido un señalamiento reiterado de diversas oenegés sobre la probable manipulación de la estadística delictiva y de víctimas.
Mientras en el informe anterior (mayo) se registró un aumento del 150 %, al pasar de 22 a 55 mujeres privadas de su libertad; en la actualización de junio las cifras fueron alteradas y la incidencia de víctimas de mayo se redujo a 10, sugiriendo que sin las 45 víctimas contabilizadas en mayo por el SESNSP implicó una supuesta reducción.
Según el informe, de las 359 víctimas de secuestro que se contabilizan de enero a junio de este año, sólo 96 corresponden a víctimas mujeres, equivalente al 26.7 %. De esas 96 víctimas, 23 % con una suma de 22 mujeres —el total de víctimas modificado en mayo— se registró en la Ciudad de México, siendo la entidad con la mayor incidencia de mujeres secuestradas en el país, según el informe.
Los casos de violaciones en junio también repuntaron en 7.8 %; las llamadas al 911 por incidentes de violencia contra la mujer se incrementaron en 12.3 %; mientras que las llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de abuso sexual, que también alcanzaron su máximo desde 2015 con más de 800 reportes, superaron en 15.1 % a las recibidas en mayo.
Vulnerables. El número de víctimas de corrupción de menores se incrementó junto a otras problemáticas.
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