Con un decreto publicado al filo de la medianoche del lunes, el gobierno de Veracruz declaró extinto el Fideicomiso del Acuario, con lo que será la administración de Cuitláhuac García la que tomará el control de este centro.
El control de la operación de conservación de especies estará a cargo de la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente (PMA), ya que el acuario pasará a ser parte de su estructura orgánica.
Según la administración veracruzana, los ingresos que generan el millón de visitantes al año son multimillonarios, lo que obliga a devolver los recursos del fideicomiso no ejercidos a la administración estatal.
La PMA también se ocupará de la representación legal del recinto, con sus derechos y obligaciones con los diferentes prestadores de servicios que están en la Plaza Acuario.
Según el propio García Jiménez, la decisión de extinguir el único fideicomiso que quedaba en el estado tiene que ver con la admisión de la muerte del manatí por parte de la administración del Acuario que denunció durante la tarde del lunes.
El mandatario estatal instruyó a la PMA para realizar los convenios correspondientes con diferentes instituciones educativas para seguir con la educación sobre las especies que se conservan en el recinto.
También deberán hacer una investigación sobre la muerte del manatí e inventariar los recursos con los que cuenta el acuario, que ahora se denominará Aquarium del Puerto de Veracruz. Y realizar un acuerdo de pagos con los trabajadores.
Después de revisar qué hay, se planteará la fecha de reapertura del recinto, así como se garantizará el régimen jurídico del Aquarium. BG
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