La secretaria de gobernación Olga Sánchez Cordero aseguró que la dinámica bilateral con Estados Unidos se verá modificada con arribo de Joe Biden y Kamala Harris a la Casa Blanca, sin embargo, se dijo optimista en temas como la migración.
En su participación en la Reunión de Embajadores y Cónsules, la titular de Segob señaló que la migración es uno de los grandes retos a nivel mundial que pone a prueba la cooperación, colaboración y corresponsabilidad entre naciones.
Sánchez Cordero indicó que la situación geográfica, económica y social de México lo obliga a atender el origen, tránsito, destino y retorno de migrantes, con estricto apego a los derechos humanos, que es “el eje rector de nuestra política migratoria”.
En 2019, dijo, se alcanzó un volumen de migración que no se veía desde hace muchos años, lo que provocó una “seria tención” entre México y Estados Unidos, ante la amenaza de aranceles y restricciones migratorias.
Apuntó que el flujo migratorio disminuyó a partir de agosto de 2019 y hasta febrero de este año, y presentó número bajos durante este año motivado por la pandemia de Covid-19.
Refirió que la economía de todos los países se vio severamente afectada por la pandemia, por lo que la migración será una de las alternativas más viables para la gente que quiera mejorar sus ingresos.
“México no es la causa del problema (migratorio) pero reiteramos nuestra voluntad para ser parte de la solución de manera corresponsable con los gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvador, así como por su puesto con el próximo gobierno de Estados Unidos”.
