Un día como ayer, pero de 1929, nació en Atlanta, EU, uno de los pastores evangélicos más reconocidos en el mundo: Martin Luther King. Ha sido uno de los pocos ministros de culto en ganar un Premio Nobel por su activismo pacífico que logró cambiar leyes e ideologías en un país lleno de desigualdades.
Los estadunidenses conmemoran fechas célebres que el pastor bautista dejó como legado al mundo como el 26 de agosto cuando el reverendo presentó en Washington, frente a unas 250 mil personas, su discurso-sermón
I have a dream
(Tengo un sueño). También se conmemora en la Unión Americana que a finales de 1955 fue arrestada Rosa Parks, por negarse a ceder un asiento a un hombre blanco en un autobús, lo que desató un primer boicot en contra de la línea por considerar
racistas
a sus dueños y operadores.
En su país natal y en otras partes del mundo, existen calles, escuelas, universidades, instituciones, hospitales, bibliotecas, monumentos y plazas con el nombre del activista que a sus 25 años de edad fue a quien miles de ministros de culto eligieron para encabezar un movimiento de resistencia en contra del racismo.
Luther King logró, a través la resistencia no violenta, que la Suprema Corte de EU declarara ilegal la segregación en sitios públicos, lo que le valió arrestos, multas, amenazas… y finalmente la muerte. Dijo textual “no tengo miedo” cuando le preguntaron si temía por su vida tras organizar las protestas en calles de EU. Años más tarde los legisladores norteamericanos debieron aprobar la Ley de Derechos Civiles.
Una de sus estrategias para realizar boicots y marchas era aconsejar a sus seguidores arrodillarse frente a establecimientos, restaurantes, escuelas y oficinas para que cuando llegara la policía los encontrara orando y no realizando actos contrarios a la ley, sin embargo, los protestantes eran encarcelados y aún dentro de la prisión continuaban cantando himnos alusivos a la libertad.
En octubre de 1964, el doctor Luther King, a sus 35 años de edad, recibió el Premio Nobel de la Paz, pero en 1968 fue asesinado en el balcón de un hotel cuando bebía una cerveza en compañía del músico Ben Branch y se disponía a participar en una protesta, según algunos biógrafos.
En el contexto mexicano, el diputado local de Coahuila, Antonio Attolini Murra, comparó hace algunos años al presidente Andrés Manuel López Obrador con Jesucristo, Mahatma Gandhi y Luther King. El legislador consideró, al igual que muchos de sus seguidores, que el mandatario ha sido un defensor de las garantías. Por cierto, el Ejecutivo estuvo presente, a invitación del hijo mayor de Luther King, en un homenaje rendido al activista norteamericano en julio de 2022 en Washington.
PALABRA DE HONOR: funcionarios de Gaza han comentado que en la guerra de Israel contra Hamás han muerto cerca de 4 mil niños palestinos. Las Asociaciones Religiosas en México no han dicho nada al respecto. Quizá su reino no es de este mundo.