Ministros de Culto del norte del país están preocupados por un nuevo fenómeno que está aflorando entre los jóvenes de 15 a 30 años. Se trata de intercambios económico-sexuales con personas de la tercera edad. Chicas que tiene una relación eventual con alguien mayor para que sufraguen sus gastos a cambio de favores eróticos.
Conocidas como “sugar dating” (citas dulces) las jóvenes contactan en redes sociales o medios en línea a hombres para pedir apoyo económico ofreciendo a contraentrega pláticas vía remota, encuentros románticos o material audiovisual, sin llegar a una relación sexual, con el fin de evitar delitos que pudieran involucrar legalmente a ambas partes.
Los “sugar daddy” (papi dulce) son en su mayoría personas con recursos suficientes para pagar los servicios de una sexoservidora, pero que tienen preferencia por las estudiantes menores de 30 años que gustan de asistir a lugares exclusivos, usar ropa de marca o pagar deudas, pero que no cuentan con el dinero suficiente para cubrir la suntuosidad. Ellas, conocidas como “sugar baby” (bebé dulce), ofrecen exhibirse con ellos en bares o restaurante, fingiendo ser pareja, o bien mantener una aparente relación sentimental permitiendo privilegios a quien cubre los gastos.
En Europa, el fenómeno llega a convertirse en trata de personas y esclavitud sexual. La inexperiencia de ellas las lleva a pensar que se es un simple intercambio de depósitos en efectivo para fingir atracción sentimental, sin sospechar que termina en secuestros y explotación. Por ello, la organización evangélica “Diaconía España” inició una campaña denominada
Desactiva la Trata
que incluye carteles en las estaciones del metro en Madrid, alertando del peligro de obtener dinero fácil.
La moda “sugar” llegó a Estados Unidos la década pasada, donde firmas especializadas de abogados registran casos de abuso sexual y extorsión, como lo afirman directivos cristianos de
The Carlson Law Firm: “esto se ha vuelto una pandemia, donde los proxenetas llevan la de ganar porque los delitos en que incurren son menores pues apelan a que son
actividades consensuadas entre adultos, donde no se puede probar alguna agresión sexual ni pago de servicios”.
En México esta modalidad se disfraza como un ingenuo pasatiempo, según explica el pastor “Héctor Vargas” de Nuevo León. Dice que ha atendido a chicas, incluso menores de edad, que piden consejería espiritual luego de experimentar un encuentro con gente de la tercera edad a cambio de ropa, citas en lugares exclusivos y aparatos telefónicos que llegan a costar más de 30 mil pesos, y permitieron tocamientos, insinuaciones sexuales, hasta sesiones fotográficas donde aparecen semidesnudas.
“La mayoría creen que esto es un juego de dar y recibir, sin mayor implicación que el dinero… En estas entrevistas no se acostumbran las relaciones íntimas y piensan que por ello no hay falta moral, ética y menos espiritual, pero no saben el peligro al que se enfrentan cuando son grabadas sin su consentimiento… vienen a buscar auxilio no tanto bíblico, sino además jurídico por el acoso que experimentan después de una primera cita”, comenta el reverendo.
“Cada día es más frecuente la asistencia que brindamos muchos pastores a estas personas… Pero me espanta el número de ellas que buscan lujos a cambio de su integridad”, concluye Héctor.
En una segunda entrega, las declaraciones de pastores y líderes de Chihuahua, Tamaulipas, Baja California y Sonora.
PALABRA DE HONOR: Resultado de las votaciones: en Hidalgo, la alianza AMLO-Fayad ganó la gubernatura con el expriísta Julio Menchaca Salazar; en Oaxaca, también obtuvo el triunfo la alianza AMLO-Murat con Salomón Jara Cruz. En Tamaulipas, el otro ex priísta, Américo Villarreal, llega a gobernar con un margen muy cerrado. Su padre también fue gobernador tricolor. El abstencionismo gana en Aguascalientes, Quintana Roo y Durango. Todos felices, felices, felices.
