A la ceremonia para recibir la condecoración Miguel Hidalgo faltó el doctor Luis Rey Calderón Leal, uno de los médicos laureados.
Una mujer de blusa color crema y pantalones negros destacaba de la formación de profesionales de Salud que recibirían la condecoración Miguel Hidalgo. Resaltaba por ser la única que no llevaba el uniforme habitual de médicas y enfermeras.
La mujer estaba formada entre los laureados, pero la condecoración no era para ella sino para su esposo, el Teniente de fragata del servicio de sanidad naval y médico cirujano especialista en medicina familiar del Hospital Naval de Veracruz quien murió el pasado 2 de julio de Covid-19.
“Falleció el 2 de julio de 2020 siendo un gran compañero y ser humano. Siempre estuvo dispuesto en la primera línea de batalla y perdió la vida luchando contra el Covid, cuidando de sus pacientes hasta el último día”, se dijo en la Plancha del Zócalo al otorgar la condecoración póstuma.
La mujer sin bata blanca era Zaira Hernández Salazar, quien acudió en representación del doctor Luis Rey Calderón Leal para recibir la máxima distinción que otorga el Estado mexicano.
Cuando el nombre de su esposo resonó en la plancha del Zócalo durante el Desfile Militar, Zaira Hernández bajó la mirada hacia la medalla que era para su esposo, se llevó la mano derecha al corazón y se inclinó en señal de agradecimiento.
El Teniente Calderón Leal fue el único de los condecorados que recibió el reconocimiento de forma póstuma. Los otros 57 profesionales de la salud ganadores de la distinción acudieron personalmente. NR
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