Una campaña que nació muerta
El “destape” de Aureoles para 2024 fue aderezado por reuniones con el secretario de la OEA y con Monreal, quesque para la reconciliación, con quien debería reconciliarse es con Ramírez Bedolla, quien engorda las denuncias en su contra

CIUDAD DE MÉXICO, 06SEPTIEMBRE2021.- Silvano Aureoles, gobernador del estado de Michoacán, ofreció una conferencia de prensa donde detallo las situaciones por las que las elecciones del pasado 6 de junio tendrían que anularse en el estado que gobierna ya que asegura hubo influencia del narcotráfico en dichos comisios. FOTO: DANIEL AUGUSTO /CUARTOSCURO.COM
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Tal parece que el exgobernador michoacano, Silvano Aureoles Conejo, o no sabe o no le han explicado el significado del proverbio “si ves las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar”, y es que luego de su nada sorpresivo “destape” para 2024, que fue aderezando en los últimos meses con sus apresurados encuentros con personajes como Luis Almagro, secretario general de la OEA, y con el casi exmorenista, Ricardo Monreal Ávila, quesque para el “rescate” y la “reconciliación” del país, a don Silvano se le olvida que con quien debe reconciliarse es con su sucesor, Alfredo Ramírez Bedolla, pues dicen los bien informados, el ahora gobernador de Michoacán se ha dedicado a engordar las denuncias contra el perredista, a quien ha señalado por malos manejos y malversaciones millonarias de fondos públicos durante su gestión al frente del estado, y que se sumarían a las pesquisas que, dicen los bien enterados, ya tiene abiertas la FGR desde hace meses.
Ni modo, aspiraciones políticas vemos, carpetas de investigación no sabemos.