Uno de los que andan muy preocupados en estos días es el diputado federal Jorge Carvallo Delfín, muy cercano al exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, porque es uno de los muy directamente vinculados con fraudes, sí, varios fraudes, a través de tres distintas empresas, en la Secretaría de Salud y de Educación de Veracruz. El más grave, dicen los que saben, es que una de las empresas que dirigen dos de sus primos hermanos, la de Especialidades Médicas del Sureste, fue la que administró los medicamentos falsificados de Roche, empresa que se ha deslindado del caso y en su momento pidió una investigación. Ahora que vio don Jorge cómo uno de sus padrinos, Fidel Herrera, renunció este domingo al consulado en Barcelona para regresar a México y defenderse de las mismas imputaciones, y que el gobernador Miguel Ángel Yunes no se detendrá y ya comentó entre sus cercanos que pedirá su desafuero, las cosas no andan fáciles para el diputado, pues hay pruebas de que él abrió las puertas a sus primos y se investiga qué tanto se benefició de ello. Para muestra, se ha encontrado en un solo contrato que la empresa de Especialidades ganó 58 millones de pesos.