El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, visitará las obras del muro fronterizo con México previo a salir de la presidencia.
El muro fue una de las más sonadas y polémicas promesas de campaña del republicano en 2016.
Se prevé que el martes 12 de enero haga una visita al Valle del Río Grande en Texas, donde hace una semana se finalizaron 724 kilómetros del nuevo muro fronterizo.
“Hacemos 400 pies diarios (122 metros). No han dicho que van a parar. Si ya gastaron, ¿cómo lo van a dejar incompleto?”, dice un obrero a la AFP a través de la frontera, que colinda con el mexicano poblado de Puerto Palomas. Apenas pronunciadas estas palabras -en perfecto español-, su supervisor le recuerda que no debe hablar con periodistas.
A ese ritmo, los trabajadores de esta empresa estadounidense podrían construir 5.5 km más hasta el 19 de enero, último día de mandato de Trump, antes de cuyo gobierno ya existían 548.6 km de barrera en esta frontera que mide más de 3 mil km., una de las más grandes del mundo.
Durante su administración se levantaron 658.1 km, muy lejos de los mil 187.7 km que ofreció erigir, según datos del Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza estadounidense (CBP), al 20 de noviembre.
Solo 94.8 km son nueva edificación, pues el grueso del trabajo corresponde al refuerzo de la antigua estructura, que de medir unos cuatro metros ahora es un armatoste de acero de casi 10 metros de alto.
El avance del muro -que Trump prometió “grande y hermoso"- ha costado 15 mil millones de dólares. Y aunque por ahora es una promesa a medio camino, bastó para quebrar los sueños, y también los huesos, de muchos migrantes que se aventuraron a saltar. (Con información de AFP) NR