Tras uno de sus habituales vuelos de supervisión a la construcción del Tren Maya, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la obra no será “un simple ferrocarril”, sino un medio de comunicación eficaz y moderno que fomentará el turismo arqueológico.
El mandatario federal llevó a cabo la supervisión de la zona por segundo día este jueves, mostrando la vista desde los cielos a través de sus redes sociales.
De acuerdo a López Obrador, el Tren Maya permitirá visitar “espléndidas zonas arqueológicas del México profundo”, como la ciudad maya de Ichkabal, ubicada cerca de la Laguna de los siete colores de Bacalar. “Vamos a explorar y restaurar con el propósito de abrir al público”, escribió.
El presidente arribó al sureste del país para realizar la última supervisión de su megaproyecto en el año, cuya inauguración planea llevar a cabo en 2023. La mañana de este jueves ofreció su conferencia de prensa matutina desde Chetumal, Quintana Roo.
Ichkabal, la ciudad que continúa bajo investigaciones
Ichkabal, ubicada a 40 kilómetros de la Laguna de Bacalar, será una de las zonas que el gobierno federal planea impulsar con el Tren Maya; es considerada como una de los espacios ceremoniales más importantes de la comunidad maya.
Fue descubierta en 1994, es decir, hace 28 años, luego de permanecer oculta por mucho tiempo debido a las formaciones selváticas que se encuentran a su alrededor.
Arqueólogos adscritos al Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de Quintana Roo han señalado que esta zona muestra indicios del origen de la dinastía Kaanu’l (serpiente), una de las más poderosas de la civilización maya. RM
Seguir leyendo |
Tren Maya se construirá con material traído de Cuba
Se suman 139 inmuebles a los expropiados para el Tren Maya
Tramo elevado del Tren Maya, con ‘daño mínimo’ al ambiente: AMLO