Ayer se cumplió un mes de que Jesús Murillo Karam se encuentra recluido en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México tras su detención por su presunta responsabilidad en el caso Ayotzinapa. Hoy, sus abogados han interpuesto un par de amparos en busca de que el exprocurador no sea juzgado.
Ambas solicitudes fueron interpuestas ante el Poder Judicial de la Federación (PJF), con esto se pretende ir en contra de la vinculación a proceso y de las medidas cautelares que se le dictaron, publicó La Jornada, medio que cita “fuentes judiciales”.
Recordemos que Murillo Karam fue procesado por los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de la justicia, esto por su intervención en los hechos ocurridos en Iguala el 26 y 27 de septiembre de 2014, que derivaron en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
De acuerdo con las investigaciones, el extitular de la extinta Procuraduría General de la República (PGR) interfirió en el desarrollo de las indagatorias y fue omiso sobre la tortura a la que se sometió a distintos implicados en el caso.
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El juez determinó en la audiencia inicial procesar a Murillo Karam, además, imponerle prisión preventiva justificada. Esto, argumentó, ante el riesgo que existe de que huyera del país debido a que cuenta con cinco propiedades y fondos por 85 millones de pesos, con cuentas bancarias en México y Estados Unidos.
Hay que resaltar que las pruebas presentadas por la Fiscalía General de la República (FGR) no incluyeron registros de llamadas, bitácoras de vuelo, videos, documentos de la Semar ni testimonios de testigo. Sin embargo, el juez Marco Antonio Fuerte concluyó que los elementos entregados fueron suficientes para procesar al exfuncionario.
El juzgador impuso 90 días como plazo para realizar la investigación complementaria, a pesar de que la fiscalía solicitó el doble de tiempo para recabar más pruebas. GA
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