Tras detención de 70 personas, Ecuador vuelve poco a poco a la calma
En las primeras horas de este miércoles, las calles lucieron vacías, toda vez que los ciudadanos permanecen resguardados
Desde el momento que salieron a las calles, los militares ecuatorianos no han perdido el tiempo. Según las fuerzas de seguridad de Ecuador, al menos 70 personas han sido detenidas por participar en actos de violencia.
La cifra contempla la recaptura de 17 presos fugados y el apresamiento de los 13 encapuchados que irrumpieron en una transmisión en vivo de TC Televisión.
Según lo dicho por Víctor Herrera, comandante de la policía, tanto a los 13 delincuentes que tomaron el canal, como cinco personas más, serán juzgados y procesados por “actos terroristas”, y se espera la captura de dos individuos más bajo los mismos cargos.
También se dio a conocer la liberación de tres de los policías secuestrados por criminales la madrugada de este martes. Mientras que a lo largo de todo el territorio ecuatoriano se han decomisado cientos de explosivos y armas, así como vehículos.
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Desde la declaratoria de “estado de excepción” del presidente Daniel Noboa, la calma ha vuelto poco a poco a las ciudades ecuatorianas, pero el problema aún no se controla. Adolfo Macías, alias “Fito” continúa prófugo de la ley tras su fuga de la prisión, y diversos miembros de Los Choneros —la banda delictiva que dirige— siguen en las calles.
Asimismo se reportó la fuga de Fabricio Colón Pico, líder de la organización criminal Los Lobos.
La información fue dada a conocer en una rueda de prensa en la sede presidencial. En el edificio, rodeado de cientos de militares, Roberto Izurieta, secretario de Comunicación del gobierno de Ecuador, aseguró que “el país está en relativa calma”, pero no dejó de insistir que “el enemigo del Estado es el crimen organizado”.
Y si bien su mensaje fue bien recibido, lo cierto es que en Ecuador aún se respira un ambiente de inseguridad, ya que en las primeras horas de este miércoles, las calles lucieron vacías, toda vez que los ciudadanos permanecen resguardados en sus hogares, y las labores de escuelas y oficinas permanecen suspendidas.
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