BUENOS AIRES, ARGENTINA. Los servicios de energía fueron restablecidos en más del 70% en Argentina y Uruguay luego de un apagón masivo que dejó sin electricidad a los dos países por 12 horas.
Pasadas las 19:00 horas el servicio había vuelto para el 77% de los usuarios en Argentina, según el ministerio de Energía. Todavía se presentan cortes en las provincias de Salta, Jujuy, Tucumán y Santiago del Estero. Tierra del Fuego, en el extremo sur, fue la única zona a salvo del apagón, pues es independiente del sistema nacional.
La empresa UTE de Uruguay indicó por su parte que los servicios se reanudaron en al menos 88% de ese país. Las autoridades aún desconocen las causas del corte eléctrico.
“Son fallas que ocurren con asiduidad. Lo extraordinario es la cadena de acontecimientos posteriores que causaron la desconexión total”, dijo el ministro de Energía, Gustavo Lopetegui, en una rueda de prensa, al explicar que la caída “se produce de forma automática para proteger el sistema”.
“No tenemos más información en este momento de por qué ocurrió. No descartamos ninguna posibilidad, pero un ciberataque no figura entre las alternativas primarias que se están considerando”, añadió.
Es la primera vez que ocurre un apagón que alcanza a la totalidad de Argentina y Uruguay. En Paraguay se registraron cortes momentáneos y localizados de energía.
Ciudades a media máquina
En Buenos Aires, pese al retorno casi completo de la energía, no funciona el metro ni los trenes y el servicio de transporte se limita a autobuses y taxis.
Algunos supermercados y otros comercios abrieron desde primera hora de la mañana, apoyados por generadores de energía propios.
Los centros de salud trabajaron con plantas eléctricas. “El único inconveniente son los ascensores. Solo tenemos uno en funcionamiento, pero todos los servicios están operando sin problemas”, dijo a la AFP un empleado en el Hospital Fernández.
Montevideo también lució un poco desolado, en un día en el que ambas capitales sufrieron además lluvias intensas.
Día del padre a oscuras
Este domingo es el Día del Padre en Argentina y los restaurantes esperaban mucha clientela.
“Esto nos mató", dijo a la AFP Luciano Ferreira, dueño de un restaurante popular en el barrio de Boedo, donde al mediodía aún no había vuelto la luz. Con meseros y parrilleros sentados a la espera, explicó que esperaban un lleno total y ganar dos o tres veces lo que suelen ingresar en un día normal, pero la oportunidad se perdió.
Muchos desconectaron todos sus aparatos en casa por temor a que se dañaran por un alto voltaje al regresar la electricidad.
En grupos de Whatsapp, amigos y vecinos compartieron recomendaciones como la de ahorrar agua por si el apagón se extendía en el tiempo.
En la ciudad de Junín, en la región llanera de la pampa argentina, los habitantes se abastecieron en agua potable en los supermercados. Esta localidad figura entre las que aún no han normalizado el servicio.
“Por suerte en el patio de la casa tenía dos baldes que se llenaron solos con la lluvia. Volvimos a la edad de piedra. Esto pasa porque dependemos mucho de las computadoras”, dijo a la AFP Eduardo Gralatto, vecino de Junín.
En Córdoba, la segunda ciudad de Argentina, la electricidad volvió parcialmente por sectores hacia el final de la tarde.
“Optamos por abrir porque necesitamos trabajar, pero ya temprano perdimos siete u ocho mesas de clientes que se levantaron y se fueron porque no podemos preparar café ni hornear pan”, comentó a la AFP Carlos Arce, dueño de una panadería en Córdoba.
En Argentina se celebran además este domingo elecciones a gobernador en cuatro provincias, y reportes de prensa daban cuenta de votantes sufragando a la luz de las velas.