Los robos en distintos puntos del planeta le generaba cada vez mayores pérdidas, y es que la marca de tenis y ropa deportiva era un imán para los asaltos en tránsito, tras el desembarco, y antes de llegar a los centros de distribución y a las tiendas. Así que tras analizar sus opciones llegó a una decisión simple, pero impactó en los índices de asaltos en su mercancías.
Sólo separaron, en dos embarques diferentes, los zapatos derechos de los izquierdos, y aunque fue paulatino el decremento en la incidencia, prácticamente inhibió en parte el hurto en carreteras.
El robo de autotransporte no cesa ni en México ni en el mundo, esto incluso a pesar de los esfuerzos de las autoridades por reducirlos, de hecho, en el último informe del Gobierno federal se revela que entre enero y agosto de 2023 los robos al autotransporte aumentaron 9.7 % frente al mismo periodo de 2022; es decir, pasaron de cinco mil 707 a seis mil 261 ilícitos efectuados por el crimen.
Sin embargo, a pesar de las pérdidas y el riesgo que conlleva para sus operadores que en varios casos han perdido la vida, las empresas están incrementando su presencia en las carreteras del país, muestran cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Para lograr disminuir el riesgo para sus empleados y las pérdidas, las compañías han tenido que implementar diferentes estrategias, como la estadounidense dedicada a los tenis y ropa deportiva, o como lo hizo otra famosa empresa de tablets y smartphones, que está aplicando medidas más complejas que implicaron el uso de la tecnología en sus dispositivos, los cuales, si eran robados, los hacían inutilizables. Pero esa suerte no es para todas las empresas, ya que la mayoría, a pesar de tomar algunas acciones no son tan certeras para detener el ilícito. Ropa, alimentos, electrónicos, y una larga lista de productos que son transportados sufren robos y rápidamente esas mercancías son comercializadas a precios irrisorios pero que dañan los ingresos de esas compañías.
›El problema es que aunque el transporte sigue expandiéndose por la demanda que crece sostenidamente, una mayor incidencia delictiva al final eleva el costo de las mercancías para el consumidor, que debe desembolsar una mayor cantidad de dinero.
Números para arriba
Así, a pesar de que el crimen organizado en México tiene bajo su yugo al autotransporte, ya sea de carga o de pasajeros, el crecimiento del flujo de vehículos por carreteras o autopistas continúa expandiéndose. Datos del Inegi muestran que del bache en que cayó la economía del país durante la pandemia, el sector del autotransporte se recuperó prácticamente de manera inmediata, ya que para enero de 2021 el número de vehículos transitando con mercancías había impuesto una nueva marca que desbancó al máximo histórico mensual alcanzado en julio de 2019, que era de 140 mil 856 unidades.
La demanda de mercancías en el interior del país se veía impulsada por la llegada de las vacunas, las remesas y un súbito aumento de las exportaciones, principalmente pedidos solicitados desde Estados Unidos, factores que repuntaron el transporte de carga terrestre a cifras prepandemia y que en pocos meses saltó a máximos históricos.
En el primer mes de 2021, la información del Inegi reveló que 143 mil 252 vehículos con carga transitaron por el país, tendencia que no ha dejado de crecer constantemente en el último par de años.
El dato de julio de este año (última actualización) mostró que las unidades que circularon a lo largo del país alcanzaron los 155 mil 066 camiones de carga, 8.2 % más que hace dos años y medio. Sólo en lo que va de este año ha crecido un 5.0 % el trasiego de mercancías en el país.
El caso del transporte de pasajeros tiene una historia diferente, una caída en el tránsito que obedece a los cambios y oferta de otros tipos de traslado, como el aéreo, ya que durante la pandemia este sector fue de los más golpeados, con una caída de más de 50 % en la demanda, lo que orilló a las aerolíneas a bajar precios para atraer clientes, lo que también afectó negativamente a los proveedores del servicio por tierra.
Las tarifas más atractivas, los menores tiempos de traslado y una mayor seguridad al viajar han cambiado las preferencias de los viajeros. Las cifras del Inegi revelan una caída de 22 % anual en julio en el número de unidades que se trasladan sobre los caminos del país. En julio de 2019, el servicio de pasajeros por autobuses marcó un récord de 41 mil 244 unidades en ese mes, y desde ese punto ha ido en declive este sector en tierra.
En el caso del transporte particular, las personas retomaron sus rutas, no se incrementaron después de la pandemia, pero sí regresaron a los niveles precovid.
La tendencia muestra una gran recuperación de manera general en el tránsito de vehículos en las carreteras aunque en términos de dinero para el gobierno ha significado estar por debajo de la media de los últimos 10 años desde la crisis sanitaria y a penas en julio, muestran las cifras, alcanzó a recuperar la tendencia de crecimiento respecto al desempeño del sector de autotransporte de carga.