Las autoridades francesas investigan el caso de una adolescente que al parecer transmitió su suicidio en vivo en la popular aplicación Periscope.
La fiscalía informó el miércoles que la joven se arrojó debajo de un tren de pasajeros en la estación suburbana de Egly, al sur de París.
La mujer, cuyo nombre no se dio a conocer, supuestamente envió un mensaje de texto a una persona muy allegada minutos antes de suicidarse el martes, dijo el fiscal Eric Lallement en una declaración.
“Supuestamente también formuló declaraciones a usuarios de internet por medio de la aplicación Periscope para explicar su acción”, dijo el fiscal. La declaración agregó que la mujer nació en 1997, lo que significa que tenía entre 18 y 19 años.
El video fue retirado de la aplicación, pero usuarios de YouTube compartieron lo que dijeron eran algunos pasajes, sin incluir la escena del suicidio. Muestran a una joven con cabello negro largo que dice: “El video que estoy grabando ahora tiene el propósito de hacer que la gente reaccione, tener mentalidad abierta, nada más”.
No fue posible confirmar si la mujer en esos pasajes es quien se suicidó.
Periscope, propiedad de Twitter, no formuló comentarios públicamente.
Twitter, Facebook, YouTube y otras empresas de redes sociales dicen que se esfuerzan por retirar los videos que glorifican la violencia. Pero el ritmo vertiginoso de la tecnología moderna, especialmente los servicios que permiten que la gente transmita en vivo desde cualquier sitio, significa que es difícil controlar todo a toda hora.
Grupos extremistas han aprovechado la tecnología para promover su violencia.
En Estados Unidos, este año, las autoridades dijeron que una joven de 17 años en Ohio fue violada por un hombre con el que había estado bebiendo y que una amiga suya de 18 años transmitió el ataque en vivo en Periscope.
vía AP