Con la llegada del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, la tendencia con que el país iba reduciendo el índice de rezago social no sólo bajó de velocidad, sino que hay 11 estados de la República que dieron pasos hacia atrás en cobertura educativa, atención a la salud y servicios en la vivienda.
De acuerdo con el Índice de Rezago Social Longitudinal, dado a conocer este martes por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), México tenía un puntaje de 2.9675 en el año 2000 y bajó a 2.2014 en 2005 (una reducción de 25 %); para 2010 el índice se ubicó en 1.5057 (menos 31 %) y en 2015 llegó a 0.8398 (una disminución de 44 %).
Para 2015, México había logrado tener un Índice de Rezago Social menor a un punto, lo que significa un nivel bajo de atraso en servicios educativos, de salubridad y de bienestar en el hogar.
Sin embargo, para el año 2020, segundo año de gobierno del presidente López Obrador y primer año de la pandemia de Covid-19, el índice se ubicó en 0.7799, es decir, sólo se logró reducir una décima de punto en un quinquenio o una disminución de 7 %, la más baja desde el año 2000, cuando comenzó a medirse el rezago social.
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Desde principios de siglo, todos los estados de la República bajaron de manera gradual el Índice de Rezago Social, incluidos los estados con mayor marginación, como Chiapas, Guerrero y Oaxaca.
No obstante, en el año 2020, por primera vez desde que se mide el rezago, 11 estados no sólo no bajaron su puntaje, sino que aumentó y con ello también el deterioro en la calidad de vida, como es el caso de Baja California, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Jalisco, estado de México, Morelos, Nuevo León, Quintana Roo, Tabasco y Tlaxcala.
Entre las entidades que sufrieron regresiones están cuatro que son gobernadas por Morena desde comienzos del sexenio lopezobradorista, es decir, Baja California, Chiapas, Ciudad de México y Tabasco.
Un caso a destacar es Tabasco (entidad de la que son originarios tanto el presidente López Obrador, como el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, quien gobernó la entidad entre 2018 y 2021), pues entre 2015 y 2020 presentó aumentos en porcentaje de población que carece de servicios de salud, en casas que tienen piso de tierra, domicilios sin energía eléctrica, sin lavadora, sin refrigerador y de familias que no poseen una computadora, una laptop o una tableta electrónica.
En la Ciudad de México, gobernada por Claudia Sheinbaum, aspirante a la candidatura presidencial, paso algo similar: aumentó la población sin derechohabiencia y sin acceso a servicios de salud y en familias que carecen de un refrigerador y de un televisor.
En las 32 entidades del país hubo una regresión en materia de seguridad social, en parte como consecuencia de la pandemia, pero también debido al fallido plan de sustituir el Seguro Popular con el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que nunca pudo operar a plenitud pero sí desmanteló un sistema que daba atención a los más pobres y sin atención del IMSS o el ISSSTE.
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