Pese a que el Gobierno de Estados Unidos presentó una demanda en contra de Texas por la colocación de una barrera de boyas gigantes sobre el Río Bravo, el gobernador Greg Abbott hizo caso omiso y mandó a reforzar el “muro” de alambre con púas que la acompaña entre El Paso y Ciudad Juárez, Chihuahua.
Elementos de la Guardia Nacional de Texas reforzaron las barreras de púas instaladas bajo el Puente Internacional Reforma durante el viernes. Ahora posee tres niveles de alambre, por lo que mide más de dos metros de altura.
Tanto las boyas gigantes como el alambre de púas fueron colocados con la intención de inhibir el cruce de migrantes, pero el Departamento de Justicia de EU indicó que Texas no cuenta con la autorización para hacerlo, además de señalar “preocupaciones humanitarias”.
“Es horrible ver esas púas, es algo psicológico, te quedas traumado”, comentó Érika Macías a EFE, una ecuatoriana que llegó hasta la barrera de púas con un bebé de seis meses en brazos.
Al igual que Érika, otros migrantes que han llegado a la frontera entre Juárez y El Paso han decidido no cruzar el alambre, pues apuntan que el riesgo es elevado. Tal es el caso de Eduardo Díaz, un venezolano que describió el alambrado como “inhumano”.
“Uno viene luchando desde varios países y pasas muchos traumas”, agregó.
Pero las personas no son las únicas afectadas por el alambre. De acuerdo con el ambientalista Daniel Delgadillo Díaz, del Frente en Defensa de El Chamizal, los animales de esta zona pueden quedar atrapados y lastimarse a lo largo de la barricada.
“Texas es la única autoridad que detiene cruces ilegales”
Pese a la demanda del Departamento de Justicia, las quejas formales de México y la crítica de cientos de organizaciones civiles por la colocación de las boyas gigantes, Abbott aseguró que Texas defenderá su respuesta a la crisis migratoria “creada por las políticas de Joe Biden”.
“El presidente Biden abandonó su deber constitucional de asegurar la frontera. (...) Texas es la única autoridad gubernamental que detiene los cruces fronterizos ilegales”, apuntó el republicano.
Refirió que desde el lanzamiento de la operación Lone Star se han realizado 397 mil 900 detenciones de migrantes y más de 31 mil 800 arrestos criminales, relacionados con presunto contrabando de drogas, armas y personas.
“Es común que los que cruzan ilegalmente estén contrabandeando narcóticos, dinero en efectivo o armas en su persona”, afirmó el gobierno de Texas. RM
Con información de EFE.
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