El partido Redes Sociales Progresistas (RSP) presentó al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) los mismos argumentos que Fuerza por México (FXM) —partido al que se le pretende conservar su registro— sobre los efectos adversos que tuvo la pandemia de Covid-19 en el pasado proceso electoral y el retraso en el otorgamiento de su registro; sin embargo, los magistrados miden con varas distintas.
RSP y FXM argumentan que si durante los comicios de junio pasado no lograron obtener el 3% de la votación —requisito indispensable para mantener sus registros como partidos políticos— fue por circunstancias extraordinarias producidas por la pandemia tales como: retraso en la obtención del registro del partido, demora en la entrega de financiamiento, disminución del uso de los spots y falta de acuerdos por parte de la autoridad para compensar la inequidad derivada del retraso del registro.
No obstante que se trata de idénticas circunstancias, los magistrados del tribunal electoral han adoptado posturas diferentes. Indalfer Infante Gonzales, cercano al lopezobradorismo, argumenta que la pandemia sí impidió que FXM alcanzara el 3 por ciento de los votos en la elección pasada, argumento que debe beneficiar también a RSP y PES, ya que no existe justificación jurídica para que no se vean también beneficiados de los mismos criterios.
Sin embargo, los magistrados Reyes Rodríguez Mondragón y Janine Otálora Malassis han desechado dicho argumento para Redes Sociales Progresistas (RSP) y el Partido Encuentro Social (PES).
En la exposición de motivos previo a la discusión de la eliminación del registro, RSP solicitó considerar la pandemia como un caso fortuito o de fuerza mayor que le imposibilitó alcanzar los votos solicitados en la ley electoral. Además, al ser fuerza emergente, compitió en desventaja frente a los otros partidos ya constituidos.
“Al otorgarle el registro a RSP de forma desfasada por causas ajenas a éste, se ocasionó un daño irreversible en virtud de que anuló la posibilidad de que RSP contara con los tres meses previos al inicio del proceso electoral, en los que pudo haber desarrollado las actividades propias de la etapa preparatoria de una elección”, expuso.
Esta situación, agregó, “colocó a RSP en franca desventaja con el resto de los partidos políticos, implicando a la vez que el partido dejara de gozar de las prerrogativas necesarias para posicionarse frente a la ciudadanía como el financiamiento y radio y televisión”.
Este miércoles, se prevé que el pleno del TEPJF discuta los argumentos de los partidos para determinar quiénes conservan el registro y quiénes lo pierden.