Los ejemplares de la subespecie Canis lupus baileyi llegaron al estado como parte del programa de intercambio animal, conservación, reproducción y recuperación de especies en cautiverio
Para reproducir a la pareja de pingüinos fue necesario reproducir al pie de la letra aspectos de la Antártida: una temperatura por debajo de los 0 grados, nieve real y simular la iluminación del sol en el continente más austral