La guerra en Sudán ha matado ya a 5 mil personas, pero el balance real podría ser muy superior puesto que varias zonas están incomunicadas y ninguno de los dos bandos comunica sobre sus pérdidas
El aumento en los precios de alimentos, combustibles y fertilizantes amenaza con arrastrar a los países de todas partes del mundo a la “desestabilización, inanición y migraciones multitudinarias a una escala sin precedentes”
En algunos de los distritos más afectados, aldeas enteras quedaron arrasadas y los supervivientes dicen que ni siquiera encuentran palas necesarias para enterrar a los muertos