De aplicarse el impuesto, sería de una tasa del 17.4% para los automóviles de BYD, 19.9% para los de Geely y 37.6% para los vehículos exportados por la estatal china SAIC
Ante las nuevas tecnologías, los fabricantes de la industria automotriz dicen que el comprar un carro eléctrico resulta bastante caro para los usuarios