Autoridades del municipio de Eduardo Neri, en la Sierra de Guerrero, suspendieron este lunes las clases y los servicios de salud después de los hechos de violencia registrados el miércoles pasado, que dejaron un policía muerto y seis vehículos incendiados. Pablo Higuera, edil del municipio, declaró que estos servicios fueron suspendidos en las comunidades de La Laguna, El Miraval y Xochipala. El restablecimiento de las clases y de actividades relacionadas con el sector salud están condicionadas al regreso de la tranquilidad en la zona, aclaró el presidente municipal. El miércoles pasado, 50 hombres atacaron las instalaciones de la Policía Rural Estatal, que dejó un agente muerto y cinco heridos, además de seis autos incendiados en la carretera que lleva a Tlacotepec. El edil agregó que desde la violencia registrada el 5 de septiembre, el Ejército, así como las policías estatal y federal se presentaron en la zona. A pesar de ello, el domingo por la mañana, hombres armados realizaron disparos hacia las comunidades de Puentecillas y Corralitos. Las fuerzas de seguridad realizaron un recorrido y, en las inmediaciones de Puentecillas, encontraron el cuerpo de un hombre asesinado a balazos. Además, la carretera que conduce a esa localidad estaba bloqueada por tres vehículos, que fueron retirados por las fuerzas de seguridad. (Con información de Reforma). DC