El domingo se disputará el Super Bowl LVII entre Kansas City Chiefs y Philadelphia Eagles en el State Farm Stadium de Arizona. Será la primera vez que estos equipos se enfrenten en el máximo escenario y la décima vez que se vean las caras. Kansas City tiene una ligera ventaja con cinco victorias.
Será la primera vez que dos mariscales titulares de ascendencia afroamericana y dos hermanos se enfrenten en el Super Bowl: Travis Kelce de Kansas y Jason Kelce de Philadelphia. Ambos equipos son merecedores de disputar el Vince Lombardi, ya que ambos terminaron como líderes de sus respectivas conferencias con un récord de 14 victorias y tres derrotas en la temporada regular.
Patrick Mahomes acaba de vencer a los Bengals de Joe Burrow por primera vez, a pesar de estar lesionado.
Después de tres derrotas consecutivas, finalmente superó su “kryptonita” en un juego que, de no ser por un error grave por parte de Cincinnati, podría haber ido a la prórroga y haber sido una historia diferente. Con un pie, Mahomes acaba de llevar a su equipo al Super Bowl por tercera vez en sus primeros cinco años, un logro impresionante.
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Travis Kelce es el arma favorita de Mahomes, con mil 338 yardas y 12
touchdowns en la temporada regular; ahora en la postemporada, ya ha acumulado 176 yardas aéreas y tres anotaciones en sólo dos partidos, es imparable. Buscará ser la primera ala cerrada en ser el Jugador Más Valioso del Super Bowl, además de su segundo anillo.
Philadelphia aplastó a la mejor defensa de la NFL, los San Francisco 49ers en un dominante marcador de 31-7 a su favor. Un equipo muy subestimado por su supuesto calendario ‘fácil’, pero han callando bocas. Jalen Hurts vive su mejor temporada, con tres mil 701 yardas por aire y 22 anotaciones, más 760 yardas terrestres y 13 anotaciones es un arma letal de doble filo, prácticamente imparable para todas las defensas que se lo han topado. A.J Brown ha sido el más buscado por Hurts con mil 496 yardas por recepción y 11 anotaciones, tienen una química inquebrantable.
El duelo de entrenadores también será clave, ya que ambos son candidatos al Entrenador del Año.
Nick Sirianni de Philadelphia es conocido por sus innovadoras jugadas ofensivas y en su segundo año a cargo ha llevado a los Eagles a su cuarto Super Bowl en la historia de la franquicia con una temporada espectacular. Por otro lado, Andy Reid, estratega de los Chiefs, es considerado uno de los mejores entrenadores en la historia de la NFL y se encuentra entre los cinco con más victorias. Sin embargo, busca su segundo anillo, que lo podrá elevar al “Olimpo” de la NFL.
Ambos tienen lo que se necesita para levantar el anhelado Vince Lombardi. Los mariscales y el plan de juego de los estrategas serán fundamentales, ya que cualquier error, puede costarles todo el trabajo de la temporada.
El espectáculo está asegurado y la emoción al máximo en este Super Bowl, que promete ser una batalla épica entre dos de los mejores equipos de la NFL. ¡No te pierdas el juego del año!
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