El Super Bowl LV perdió a grandes marcas que en otros años se anunciaron por televisión como la refresquera Coca Cola y la cervecera Budweiser.
Las compañías replantearon su estrategia de publicidad y decidieron ausentarse de la transmisión del medio tiempo del evento de la National Football League (NFL) del 7 de febrero.
Budweiser rechazó aparecer en la transmisión, rompiendo con una continuidad de 37 años, del medio tiempo donde un espacio de 30 segundos cuesta cerca de 5.5 millones de dólares en la cadena CBS, dueña de los derechos de televisión del Super Bowl.
Sin embargo, la empresa dueña de Budweiser, Anheuser-Busch, todavía cuenta con cuatro minutos al aire para promocionar cualquiera de sus otros productos vinculados a la sustancia del alcohol (Bud Light, Bud Light Seltzer Lemonade, Michelob Ultra y Michelob Ultra Organic Seltzer).
Por su parte, PepsiCo también dejó los cortos y se centró en patrocinar el show entre el partido donde se presentará el canadiense The Weeknd.
El caso de la compañía Coca Cola fue extremo ya que informó su baja de la transmisión del encuentro entre Tampa Bay y Kansas City para “asegurar que estamos invirtiendo en los recursos adecuados en esta época sin precedente”.
Un año antes, Coca Cola gastó 10 millones de dólares en el Super Bowl LIV en la cadena estadounidense Fox Sports.
El acontecimiento deportivo que enfrentó a Kansas City y San Francisco, de hace un año, tuvo una audiencia de 98,2 millones de espectadores tan solo en el espectáculo del medio tiempo.
De acuerdo a datos de Nielsen IBOPE, en México 3.66 millones de personas vieron el partido, mientras que 4.42 millones sintonizaron el show protagonizado por Jennifer López y Shakira. JMR
(Con información de EFE y Nielsen IBOPE)
