El fin de la pandemia de Covid-19, o al menos de su fase más crítica, podría alargarse en todo América debido a la propagación de un sublinaje de Ómicron sigiloso, que a pesar de no tener aún un nombre propio, ha disparado los contagios desde Argentina hasta Nueva York en una nueva ola de la que México difícilmente podrá escapar.
La subvariante BA.2.12, es decir que proviene de otro sublinaje del SARS-CoV-2, es la responsable del vertiginoso aumento de casos en todo el continente durante las últimas semanas, y aunque la situación es más crítica en algunos países, los expertos advierten que esta nueva ola podría causar mayores problemas en aquellas zonas en donde la narrativa sobre el supuesto fin de la pandemia se ha impuesto sobre los datos duros.
En México esta subvariante representa uno de cada 10 de casos nuevos reportados hasta este domingo, pero si se toman en cuenta otros sublinajes de Ómicron sigiloso como BA.2.12.1 o BA.2.3 esta cifra se dispara hasta 57%, por lo que se puede observar un cambio importante en el panorama epidemiológico del país.
Información del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) revela que BA.2.12 se detectó en siete de cada 10 nuevos contagios reportados en Nueva York durante la última semana, lo que representa un crecimiento de 24 puntos en tan sólo una quincena, y que muestra la alta transmisibilidad de este sublinaje.
El incremento de hospitalizaciones en las últimas semanas es tal, que los indicadores de riesgo específicos del CDC para la ciudad de Nueva York, así como otras zonas densamente pobladas de ese estado, se han aproximado a un nivel de alerta alto por primera vez desde la última semana de marzo cuando se registraban 157 nuevos ingresos por esta enfermedad al día.
Oficiales de salud de este estado han lanzado una serie de fuertes recomendaciones para que el uso de mascarillas en espacios interiores vuelva a ser cotidiano, y analizan imponer nuevamente un mandato para que las personas que asisten a eventos en lugares cerrados lo hagan con cubrebocas de alta eficacia, como los KN95 y KF94.
Algo similar sucede al otro extremo del continente, en donde este sublinaje compite con uno muy similar por el control del escenario epidemiológico de Argentina, en donde se han reportado 33 mil nuevos casos de coronavirus en los últimos siete días, una cifra que duplica los contagios registrados una semana antes.
Datos del tablero de los Servicios de Bioinformática de Estados Unidos muestran que la mitad de estos casos corresponden a BA.2.12, mientras que la subvariante BA.2.3 es responsable del resto de contagios reportados en Argentina hasta el primer día de mayo.