El sublinaje BA.2.12.1 del coronavirus SARS-CoV-2 se ha ganado el apodo de “hipertransmisible”, ya que de acuerdo con datos de los Centros de Control de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC), actualmente se encuentra en el 42.6% de los casos nuevos en ese país.
A pesar de que ya se encuentra por todo el país, la distribución de BA.2.12.1 no es, ni mucho menos, homogénea en el territorio, y solo es dominante en la llamada región 2, que incluye al estado de Nueva York con 66% de los casos nuevos.
Sin embargo hay regiones, como la 6, que incluye entre otros al estado de Texas, en dónde representa el 22.4% de los casos nuevos, mientras que prácticamente todo el resto de los casos corresponden al que hace no mucho era el sublinaje más contagioso de la variante Ómicron, BA.2, que, por cierto, dio origen a BA.2.12.1.
Ante las múltiples variantes y mutaciones del coronavirus causante de la Covid-19, los CDC han generado un sistema de monitoreo genético del SARS-CoV-2 que recopila las miles de secuencias que se hacen semanalmente en el territorio, y cada martes publican la información actualizada.
Este sistema permite apreciar el rápido crecimiento de BA.2.12.1, que en el transcurso de cuatro semanas, del 9 de abril al 7 de mayo, ha pasado de estar en el 14% de los casos a estar en 42.6 por ciento.
Hasta ahora, además de su mayor transmisibilidad es poco lo que se sabe de BA.2.12.1, y parece compartir con las otras subvariantes de Ómicron la característica de causar una enfermedad de menos severidad que la que ocasionan variantes anteriores.
En México, de acuerdo con el sitio outbreak.info, que no se actualiza tan rápidamente, la presencia de BA.2.12.1 es aún muy reducida, por debajo del 4% de los nuevos casos a nivel país; mientras que la mayor parte de los casos corresponden a BA.2.
A nivel mundial, el sublinaje tiene una presencia reducida, salvó en Canadá, por lo que se cree que puede ser originario de Estados Unidos.
