Inflación sigue cediendo y baja más de lo esperado

La inflación en la primera mitad de marzo fue de 7.12 % anual, por lo que estuvo por debajo del 7.2 % esperado por los economistas del sector privado.

El dato de esta quincena mostró que la aceleración de precios tiene menos ímpetu, va perdiendo velocidad; no obstante, una tasa de esta magnitud está 4 % arriba del objetivo de las autoridades monetarias y 3 % encima de lo permisible para considerarse que es manejable y sana para los bolsillos de los consumidores.

Las mercancías alimenticias continúan siendo el mayor factor en la formación de precios.

Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las mercancías alimenticias marcaron una tasa de 13.20 %, y aunque es menor al 13.86 % del dato previo, continúa siendo una tasa alta para cualquier familia mexicana.

Por genérico, lo que más incidió en la formación de precios de la primera mitad de marzo fue el transporte aéreo que aumentó 17.96 % quincenal, con una incidencia de 0.032 puntos porcentuales; el limón, fue el segundo que más impactó en la inflación al haberse incrementado 15.29 %, con una incidencia de 0.25 puntos porcentuales.

Entre otros genéricos, destacaron los aumentos de los ‘servicios turísticos en paquete”, que subieron 4.86 %; así también, la papa con 2.48 por ciento.
En contraparte, lo que más ayudó a que la inflación perdiera velocidad fueron los precios del jitomate, gas LP y el pollo, que tuvieron la mayor incidencia y bajas quincenales de 4.75 %, 2.43 % y 1.13 %, respectivamente. Además, se observó una baja de 1.15 % en el huevo en la primera parte de marzo.

Aunque no tuvo la mayor incidencia, es decir, su ponderación es menor en la formación de la tasa de inflación, pero fue el genérico que más bajó, el nopal, según el Inegi descendió en una quincena 14.40 por ciento.
Pese a perder velocidad y ser la inflación anual más baja en un año, aún así el daño que causa su magnitud es considerable en los bolsillos de los consumidores.

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