Considerando que en México, “la crisis de inseguridad y violencia se ha agudizado en los últimos años”, la organización México Evalúa advierte que un factor que ha contribuido a esa situación es la poca confiabilidad y veracidad de la incidencia delictiva. Muestra de ello es que en el país sólo cinco estados, —el 15% del territorio—, poseen información confiable de su estadística criminal.
Según los resultados del Índice de Confiabilidad de la Estadística Criminal (ICEC) de la organización civil, aunque actualmente hay siete entidades con una calificación favorable en una escala de 9 puntos y cinco obtuvieron los mejores resultados al momento de evaluar el registro y reporte de sus datos delictivos y particularmente sobre los homicidios dolosos, el resto de las entidades se encuentra con indicadores preocupantes.
El informe titulado “Fallas de Origen” identifica a las fiscalías en los estados de Sonora, Yucatán, Campeche, Zacatecas y Chiapas como las que reflejaron las mejores prácticas al registrar las mejores evaluaciones.
En contraste, los cincos estados peor evaluados fueron Tamaulipas, Tabasco, Guanajuato, Puebla y Oaxaca, pues mantienen datos imprecisos y poco confiables de su registro y reporte de homicidios intencionales.
“Un gobierno que trabaja con datos imperfectos no será capaz de generar un diagnóstico acertado y soluciones precisas para contrarrestar la ola de violencia que azota al país. Las fallas, sesgos o manipulación de los datos afectan la toma de decisiones, la implementación de políticas públicas y la posibilidad de hacer justicia a las víctimas y a sus familiares”, advierte la organización encabezada por la activista Edna Jaime.
Falta de capacitación en la sistematización de datos estadísticos, capacidades limitadas en investigación y falsificación o modificación de información, fueron algunas de las causas que detectó México Evalúa respecto a las deficiencias en las que prácticamente incurren ocho de cada 10 autoridades al reportar los asesinatos.