Al menos 56 personas murieron y más de 700 resultaron heridas en un terremoto de magnitud 5.6 ocurrido el lunes en la principal isla de Indonesia, Java, una sacudida que hizo temblar los rascacielos de la capital, Yakarta.
El epicentro del sismo fue ubicado cerca de Cianjur, a unos 110 km al sudeste de Yakarta, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Al menos “56 personas murieron y más de 700 (resultaron) heridas”, declaró Ridwan Kamil, gobernador de la provincia de Java Occidental. Un anterior balance daba cuenta de 46 fallecidos.
Debido al gran número de personas que siguen atrapadas, consideramos que el número de personas fallecidas y heridas va a aumentar”, añadió.
Herman Suherman, el jefe de la administración de la ciudad de Cianjur, declaró a la cadena Metro TV que había un flujo constante de víctimas.
Según él, el hospital Sayang de Cianjur no tenía más acceso a la electricidad desde el terremoto y los médicos no podían operar a las víctimas. Se necesitan más sanitarios para atender al gran número de afectados, agregó.
Vecinos de la localidad transportaban a las víctimas al hospital en todoterrenos y motos, según imágenes obtenidas por la AFP. Los cuerpos de los fallecidos eran colocados delante del establecimiento, bajo una lona.
Actualmente nos ocupamos de las personas que se encuentran en situación de urgencia en el hospital. Las ambulancias siguen llegando al hospital desde los pueblos”, aseguró Suherman.
“Hay muchas familias en los pueblos que no pudieron ser evacuadas”, agregó.
“Cientos, quizás miles de casas quedaron dañadas”, dijo Adam, un portavoz de Cianjur, que como muchos indonesios sólo tiene un nombre.
Comercios, un hospital y un internado islámico de la ciudad sufrieron importantes daños durante el movimiento telúrico, según la prensa local.
En los medios se podían ver varios edificios de la localidad con el tejado derrumbado.
Edificios evacuados en Yakarta
“Pedimos a la gente que se quede en el exterior de los edificios por el momento, teniendo en cuenta que podría haber posibles réplicas”, declaró a la prensa la directora de la agencia indonesia de meteorología, Dwikorita Karnawati.
En Yakarta también se sintió la sacudida, pero por el momento no se registraron ni víctimas ni daños importantes.
Varias personas se precipitaron fuera de los edificios. Mayadita Waluyo, abogada de 22 años, describió el pánico de los trabajadores, corriendo a las salidas de emergencia.
“Estaba trabajando cuando el suelo tembló. Pude sentir claramente la sacudida”, relató.
Cientos de personas esperaban en el exterior de los edificios tras el terremoto. Algunas de ellas llevaban cascos de protección contra las posibles caídas de restos, constató un periodista de la AFP.
Indonesia registra a menudo terremotos por encontrarse en el “cinturón de fuego” del Pacífico, punto de encuentro de las placas tectónicas.
En 2018, en la isla de Lombok y la isla vecina de Sumbawa un violento sismo causó más de 550 muertos.
Ese mismo año, otro terremoto, de magnitud 7.5, provocó un tsunami que azotó Palu, en la isla de Sulawesi, y causó la muerte o la desaparición de 4 mil 300 personas.
En 2006, la isla de Java sufrió un sismo de magnitud 6.3 en el centro. Hubo 6 mil fallecidos y decenas de miles de heridos.
Pero el país sigue marcado por el terremoto del 26 de diciembre de 2004, de una magnitud de 9.1, frente a las costas de Sumatra.
El potente temblor desencadenó un devastador tsunami que causó la muerte de 220 mil personas en toda la región, de ellas 170 mil en Indonesia, una de las catástrofes naturales más mortíferas jamás registradas. MAAZ
SIGUE LEYENDO |