El suministro de armas a Ucrania por parte de Occidente y la incursión de las tropas nacionales en los territorios ocupados por Rusia volvieron a alejar la posibilidad de nuevos diálogos para alcanzar la paz entre ambas naciones. Así lo dio a entender Serguéi Lavrov, ministro ruso de Relaciones Exteriores, este miércoles al declarar que la búsqueda de un acuerdo “no tiene sentido”, ya que los intentos anteriores “sólo han puesto de manifiesto la falta de voluntad de la parte ucraniana para discutir seriamente de lo que sea”.
“No podemos permitir que, en la parte de Ucrania controlada por el presidente Volodymyr Zelenski o su reemplazante, se encuentren armas que pueden amenazar directamente nuestro territorio o el de las repúblicas separatistas que declararon su independencia o quieren elegir su futuro solas”, dijo a medios de comunicación en referencia al apoyo que ha recibido Ucrania por parte de países como Estados Unidos, Alemania o Reino Unido.
Por este motivo, Lavrov advirtió que si Occidente continúa entregando a Ucrania armas capaces de golpear a larga distancia, los objetivos geográficos de Rusia volverían a cambiar.
En respuesta, Dmytro Kuleba, su homólogo ucraniano, respondió que “la confesión del ministro de Exteriores ruso de su sueño de apoderarse de más tierras ucranianas demuestra que Rusia rechaza la diplomacia y se concentra en la guerra y el terror”.
Estas declaraciones tienen lugar luego de Rusia concretara en las últimas semanas avances en el este de Ucrania, tomando Severodonetsk y Lyssytchansk, puntos estratégicos que le abrieron el camino para intentar avanzar hacia las ciudades de Kramatorsk y Sloviansk, más al oeste.
Apoyo ininterrumpido
Pese a las advertencias de Lavrov, el gobierno de Estados Unidos dio a conocer que proporcionará otros cuatro sistemas de cohetes de precisión a Ucrania para ayudar a combatir la invasión. Lloyd Austin, secretario de Defensa de Estados Unidos, informó también que este nuevo paquete de ayuda incluye municiones GMLRS adicionales, las cuales pueden atacar con precisión objetivos a una distancia de hasta 80 kilómetros.
Por su parte, un grupo de países occidentales entre los que se incluye Francia, Alemania, Japón y Reino Unido, acordó aplazar el pago de intereses de la deuda ucraniana a petición de Kiev, y pidieron a otros acreedores hacer lo mismo.
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