Pemex tendrá una disminución en la carga fiscal de 15 mil millones de pesos para este 2019. Además recibirá apoyos por parte del gobierno federal; un prepago de deuda que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), a través del SAT tiene con la empresa estatal, y 32 mil millones de pesos adicionales por el combate al huachicol. Estos esfuerzos dan como resultado 107 mil millones de pesos adicionales, con lo que este año la empresa productiva del Estado no adquirirá más deuda. “Hemos tomado la decisión de apoyar a Pemex con todo”, dijo el presidente, Andrés Manuel López Obrador, en conferencia de prensa durante la presentación del plan de rescate a la empresa estatal. El apoyo financiero a la compañía afectada por complicaciones financieras estará compuesto por una capitalización del gobierno federal de 25 mil millones de pesos, otros 35 mil millones de pesos provenientes de un apoyo que el gobierno le ofreció por mejorar sus pasivos laborales y 15 mil millones generados por incentivos tributarios. Adicionalmente, se contemplará la suma total con la recuperación de 32 mil millones de pesos derivados del combate al robo de combustible, tras la estrategia emprendida por el gobierno a finales del año pasado para combatir este creciente delito, cuyas pérdidas anuales se estiman en unos 3 mil millones de dólares. “En resumen este conjunto de apoyos y medidas que van a incrementar los beneficios de la empresa nos da un ingreso adicional de 107 mil millones de pesos”, dijo Alberto Velázquez, director de finanzas de Pemex. “Esto es muy importante porque eso va a permitir fortalecer la política de inversión de la empresa”, agregó. Pemex, cuya deuda supera los 100 mil millones de dólares, ha sido golpeada recientemente por la degradación de su calificación crediticia por parte de la agencia Fitch, lo que ha generado incertidumbre entre inversionistas por su eventual impacto en las finanzas de México. En su decisión de degradar la calificación crediticia, Fitch argumentó que Pemex sufre una persistente caída de sus ingresos, que en gran proporción son utilizados para financiar al gobierno mexicano, además de registrar insuficientes niveles de inversión. La calificadora advirtió también que Pemex requiere entre 9 mil y 14 mil millones de dólares de inversión adicional anual para reponer sus reservas de hidrocarburos y detener un prolongado declive de su producción de petróleo, que cayó de 3.4 millones de barriles diarios en 2004 a 1.8 millones de barriles diarios en la actualidad. El expresidente, Enrique Peña Nieto, buscó revertir la producción menguante con una reforma en 2013 que abrió el sector energético local a la inversión privada tras más de 70 años de monopolio estatal, y así promovió la licitación de más de 100 campos petroleros. Pero el actual gobierno rechaza esa reforma a la que considera “una farsa” y se propone reactivar a la compañía. https://twitter.com/lopezobrador_/status/1096392704575959041