Fue el 85 de sus 100 compromisos cuando ganó la Presidencia de la República. Pese a la oposición, a las críticas por la “militarización del país”, en abril de 2019 nació la Guardia Nacional.
A cuatro años del hecho, se enfrenta un nuevo episodio, que, de fracasar, el presidente Andrés Manuel López Obrador puso en duda la capacidad, transparencia y legalidad en el actuar de dicha corporación.
En septiembre de 2022, el mandatario hizo una nueva propuesta que ahora se ve en riesgo. López Obrador consideró que, para evitar que la corporación perdiera el rumbo, y para evitar que suceda lo que con la Policía Federal, la Guardia Nacional debe estar bajo el control operativo y administrativo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Tras su aprobación, las modificaciones a las leyes secundarias de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, a la Ley del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana, la Ley de Ascensos de las Fuerzas Armadas y la Ley de la Guardia Nacional, diferentes opositores las impugnaron.
Pero no fue sino hasta el pasado martes, cuando el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá propuso invalidar parte de las reformas, lo que frenaría el traspaso de la Guardia Nacional a la Sedena. Dicho proyecto se discutirá la próxima semana.
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Ante esto, el presidente López Obrador volvió a sacar a relucir su desconfianza en la corporación y pidió a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que piensen bien su decisión.
“La única manera que la Guardia Nacional se mantenga como hasta ahora, como una corporación para realmente, auténticamente defender, proteger a los ciudadanos es que dependa de la Secretaría de la Defensa, porque esto significa profesionalismo, significa disciplina, significa honestidad, rectitud; si no, va a suceder lo mismo al paso del tiempo”, señaló.
El mandatario alertó que, de frenarse el traspaso, va “ser un grave error, un error garrafal”, porque es dar continuidad a la política de Genaro García Luna, el exsecretario de Seguridad preso en Estados Unidos por vínculos con el narcotráfico, una política que se echó a perder.
López Obrador resaltó la importancia de inscribir la Guardia Nacional en una institución sólida, como sucede en otros países como España, donde la Guardia Civil depende de la Secretaría de Defensa.
“Entonces, todavía es tiempo de que esto se atienda y ojalá y los ministros piensen en la seguridad de la gente, que piensen en la importancia que tiene que la Guardia Nacional depende de la Secretaría de la Defensa, como la Fuerza Aérea, como el Ejército, estamos hablando de aprovechar las escuelas, la formación, instalaciones, disciplina, todo el legado que tiene una secretaría para que se mantenga con honestidad esta corporación”, reiteró.
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