El senado de la República avaló por 114 votos a favor, cinco en contra y tres abstenciones, el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), y lo turnó al Ejecutivo para sus efectos constitucionales.
“La decisión del Senado contribuirá a un posicionamiento fuerte de México en la actual coyuntura internacional”, dijo Martí Batres, presidente de la cámara y sostuvo que la labora de los legisladores “contribuirá a un posicionamiento fuerte de México en la actual coyuntura internacional”.
Al abrir el debate sobre el tema, Héctor Vasconcelos a nombre de la Comisión de Relaciones Exteriores, sostuvo que se había llegado “al final de un arduo procesos de análisis y discusión del nuevo tratado”.
“Lo primero que quiero destacar son los consensos logrados. El nuevo documento resguarda los intereses de México en este contexto actual. Ningún tratado internacional es ideal, lo importante es que cada uno de los países partícipes encuentren ventajas”, señaló.
El legislador sin partido, Emilio Álvarez Icaza, se refirió al acuerdo como un nuevo “TLC” que responde al mismo modelo con más proteccionismo de los Estados Unidos y va a profundizar las desigualdades.
“Hay más gente excluida. ¿Este modelo nos sacará de nuestras desigualdades?”, cuestionó.
Por parte, del PRD, Antonio García Conejo dijo que las exportaciones a EU y Canadá se multiplicaron por ocho.