El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, que mantiene una buena relación con Donald Trump, bromeó el lunes con que cuando deba dejar el gobierno se enterará por un tuit del mandatario.
El leal jefe de la diplomacia estadounidense aludió así al destino de su antecesor, Rex Tillerson.
Ante la consulta recibida en un foro en su estado natal de Kansas sobre cuánto tiempo permanecerá en el cargo, Pompeo bromeó con su posible despido.
Estaré aquí hasta que me eche del cargo por Twitter”. Algo con lo que no cuento, al menos por hoy”, dijo Pompeo entre las risas de la audiencia, antes de elogiar a Trump.
Pompeo, que fue director de la CIA al principio del mandato de Trump, suele ser cuidadoso con el presidente y se ha convertido en uno de los pocos miembros del gabinete en no chocar con él.
Tillerson, un exejecutivo petrolero que intentó en vano que Trump mantuviera varios acuerdos internacionales, fue despedido a través de un tuit luego de que regresara de un viaje por África.
La Casa Blanca dio a conocer además que Tillerson se enteró de su despido mientras estaba en el baño.
Varios republicanos quieren convencer a Pompeo, un excongresista que es popular entre los conservadores, de que se presente para una banca que se abrirá en el Senado por Kansas el año próximo, cuando Trump se presente a la reelección.
Pero el secretario de Estado ha sido evasivo sobre sus intenciones. En una entrevista con The Wichita Eagle, un diario de Kansas, Pompeo, un cristiano evangélico, dijo sobre su futuro político: “Dios me llevará al lugar correcto”.
Pompeo regresó a Kansas para un encuentro sobre la promoción de empresas del centro del país, previo a una cumbre global que se celebrará en junio en La Haya.EM