Para esta semana, la Secretaría de Hacienda retiró cualquier condonación complementaria que había aplicado a la gasolina premium; pero además, los consumidores deberán pagar una parte del Impuesto Especial sobre la Producción y Servicios (IEPS), ya que no estará subsidiado al 100 por ciento.
A partir de mañana y hasta el siguiente viernes, la gasolina de alto octanaje deberá de pagar 36 centavos por cada litro que pida, mientras que la de bajo octanaje, o magna, aún se le subsidiará con el 100% y un subsidio complementario que suma 6.1798 pesos por litro; asimismo, el diésel aún conserva un subsidio de 8.1921 pesos por litro y el 100% del IEPS.
Aunque los consumidores de Premium pagarán esos 36 centavos por cada litro, el gobierno aún les va a subsidiar 4.2771 pesos, que representa el 92.23% de lo que corresponde.
De acuerdo con datos de la Procuraduría Federal del Consumidor, la semana pasada los precios de las gasolinas marcaron nuevos máximos históricos. La Premium alcanzó un promedio Nacional de 24 pesos; la Magna alcanzó los 22.05 pesos, mientras que el diésel, el promedio fue de 23.38 pesos por litro.
Cabe señalar que estos precios son el promedio nacional, ya que hay gasolineras que venden los litros muy por encima de dichas cantidades. La de bajo octanaje o regular se vendió hasta en 24.50 pesos el litro, un 11.2% más cara que la media nacional, y se vendió en el municipio de Tepehuanes, Durango.
En Naucalpan, Estado de México, la marca Shell, nuevamente, tuvo a la gasolina Premium más cara del país con 26.79 pesos, un 11.72% arriba del promedio.
El diésel, en una gasolinera de Quick Gas, ubicada en Culiacán, Sinaloa, se vendió en 26.15 pesos, 7.66% más que el promedio del país.
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