Por primera vez, cientos de migrantes centroamericanos desistieron hoy de continuar su viaje en caravana hacia Estados Unidos, tras salir de Honduras y luego de que el gobierno de México anunciara sanciones de hasta 10 años de cárcel a quien ingrese al país sin medidas sanitarias contra la Covid-19.
El pasado jueves y luego de romper los cercos de seguridad, alrededor de tres mil migrantes, principalmente de Honduras, lograron entrar de manera ilegal a Guatemala, con miras hacia Estados Unidos pasando por México.
“Nos estamos regresando porque en la frontera de Guatemala y México el Presidente dijo que las normas que nosotros llevamos no eran las correctas y que estamos violentando muchas leyes”, dijo un migrante entrevistado por Milenio.
Grupos de migrantes comenzaron su retorno a Honduras, pues también se enfrentaron con mal clima y escasos apoyos debido a la crisis económica causada por la contingencia sanitaria.