La actriz mexicana se reunió con Carlota Casiraghi y Adrien Brody en Venecia, durante la cena de gala de la Fundación Giorgio Cini, en donde ambas se saludaron con mucho entusiasmo.
Salma se robó todas las miradas con un vestido rosa fuchsia de Gucci con tocados color verde en las mangas y la solapa.