Un tribunal panameño ordenó este viernes la excarcelación bajo fianza de los abogados Jürgen Mossack y Ramón Fonseca Mora, socios fundadores del bufete Mossack Fonseca, foco del escándalo de los Papeles de Panamá (Panamá Papers), detenidos por presuntamente ocultar activos vinculados al caso Lava Jato de Brasil, informó su defensa.
El Juzgado Décimo Séptimo de Circuito Penal del Primer Circuito Judicial de Panamá concedió la excarcelación bajo fianza solicitada por los abogados, en proceso que se les sigue por el delito contra el orden económico, de blanqueo de capitales. Estaban detenidos desde el 9 de febrero pasado.
La fianza que debe pagar cada uno de los empresarios es de 500 mil balboas, conforme a la parte motiva de la resolución. En tanto, les queda prohibido salir del país sin autorización judicial a los abogados.
“El Segundo Tribunal Superior resolvió conceder el beneficio de excarcelación bajo fianza a Jürguen Mossack y Ramón Fonseca por 500 mil dólares a cada uno”, declaró la abogada Marlene Guerra, del bufete Mossack Fonseca.
Este despacho de abogados es el centro del escándalo de los Papeles de Panamá, una filtración de documentos que reveló su participación en la creación de numerosas sociedades off shore para personalidades de todo el mundo, algunas de las cuales habrían sido utilizadas para evadir impuestos o blanquear capitales.
Sin embargo, Jürgen Mossack y Ramón Fonseca no estaban presos por ese caso, sino porque la fiscalía considera que el bufete era una “organización criminal” dedicada a ocultar activos vinculados al caso Lava Jato.
El caso Lava Jato sacó a la luz sobornos de empresas constructoras brasileñas, entre ellas Odebrecht, a funcionarios de varios países de América Latina para ganarse contratos de obras públicas entre 2005 y 2014.
La encargada en Brasil de Mossack Fonseca, María Mercedes Riaño, detenida en Panamá, es reclamada por fiscales brasileños bajo acusaciones de crear sociedades offshore a través de la firma para presuntamente pagar sobornos.
Durante el proceso, los abogados de Riaño han declarado que su cliente sólo obedecía órdenes de la sede, mientras que los abogados de Mossack Fonseca alegan que su filial en Brasil actuó con independencia de la casa matriz en Panamá.
El 12 de abril, una carta a la que tuvo acceso la AFP, Mossack manifestó ser un “preso político” y acusó a los fiscales de torturas psicológicas para obtener declaraciones inculpatorias en el caso Lava Jato.
Además, acusó a la fiscalía de “aplicar presión psicológica” contra Riaño “para que testificara contra nosotros” bajo amenaza de que “más nunca vería con vida a su padre”. (Con información de AFP y La Estrella de Panamá) EC