Más de cuatro mil migrantes salieron de Tapachula con rumbo a Huixtla, Chiapas; exigen al Instituto Nacional de Migración (INM) la entrega de documentos oficiales para trasladarse a la frontera con Estados Unidos.
Previo a su salida, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pidió a las autoridades mexicanas para la creación de un cerco de seguridad que acompañe a los migrantes, pues ante la falta de atención del INM y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), decidieron dejar Tapachula y seguir su camino.
Entre los distintos contingentes que partieron la tarde del lunes se contabilizaron más de 600 niños, según el testigo de una migrante que ofreció una entrevista antes de iniciar los 40 kilómetros de distancia hasta Huixtla.
“Sólo queremos llegar a Huixtla pacíficamente, no queremos problemas ni gritos, sólo estamos pidiendo que se nos respeten nuestros derechos humanos porque las condiciones en las que estamos aquí son completamente inhumanas”, destacó.
Con temperaturas de 35 grados, falta de alimentos, medicamentos y productos de higiene básico, cerca de mil mujeres, dos mil hombres y 624 niños originarios de Centroamérica, Cuba, Haití y Venezuela, iniciaron su ruta al mediodía del lunes, para alcanzar a un contingente previo de 100 hombres que partió durante la madrugada.
Su intención es llamar la atención del INM para que les hagan caso, pues las condiciones en las que aguardan en Tapachula son denigrantes, dicen. Por eso esperan que los dejen salir del estado para continuar su camino hacia el norte.