Carlos López, un sacerdote de 73 años de edad y preso en el Reclusorio Sur, murió por Covid-19, luego de que se complicara su contagio.
El cura que purgaba una condena de 63 años de prisión por pederastia fue contagiado e internado desde el pasado miércoles en la Torre Médica de Tepepan, con dificultad para respirar, lo que ocasionó que fuera intubado.
El sacerdote también contaba con antecedentes de diabetes, por lo que el personal de trabajo social del penal confirmó el diagnóstico a sus familiares.
Su abogado Alan Juárez dijo que el contagio se debió al mal control sanitario que existe en los reclusorios del país.