Rusia y Ucrania, años de distanciamiento económico

30 de Noviembre de 2024

Rusia y Ucrania, años de distanciamiento económico

Promo_570_Análisis del alejamiento económico de Ucrania y Rusia

A partir del 2013, la relación comercial entre ambos países ha ido disminuyendo y cambiando sustancialmente, revela un estudio

Desde el punto de vista económico, las relaciones entre Rusia y Ucrania se han deteriorado en los últimos años, al tiempo que este último país se ha acercado cada vez más a la Unión Europea.

Esta es la conclusión de un análisis hecho por investigadores del Laboratorio de Crecimiento de Harvard y del Centro de Ciencias de la Complejidad de Viena publicado ayer.

Donde más claras se ven estas tendencias es en el comercio, pues mientras en 2012 una cuarta parte de las exportaciones de Ucrania iba a Rusia, que otra cuarta parte iba a la Unión Europea; se calcula que antes de que empezara la guerra, sólo 7% de las exportaciones ucranianas iban a Rusia y, en contraste, más de 40% eran para los países de la Unión Europea.

Pero las cantidades totales “no cuentan toda la historia” aseguran los autores del estudio. Tradicionalmente, Ucrania exportaba sus productos más complejos, como automóviles, trenes, aviones y productos electrónicos, a Rusia; mientras que a Europa vendía principalmente bienes agrícolas y productos manufacturados básicos. Esta relación se ha ido invirtiendo.

De manera consecuente, el centro de gravedad económico de Ucrania se ha ido desplazando, pues a finales del siglo pasado y principios del actual la actividad económica estaba sobre todo en el sureste; sin embargo, en el 2004, con la Revolución Naranja, se fue moviendo hacia el noroeste, más cerca de la Unión Europea e impulsado por las inversiones provenientes de esos países.

El desplazamiento de la actividad económica hacia el noroeste de Ucrania coincide con un alejamiento de la población ucraniana de origen étnico ruso, la cual siempre se ha concentrado en el sur y el este del país, y es una pequeña minoría en la zona occidental que limita con la Unión Europea.

Con base en su análisis de más de 200 millones de establecimientos económicos, los autores concluyen que, además de en Ucrania, el impacto de la guerra se sentirá principalmente en el sur de Alemania, París, el sur de Finlandia, el norte de Italia, Japón y varios países pequeños de Europa central y oriental se ven afectados de manera desproporcionada, como Austria, Suiza, Estonia, Lituania y Eslovaquia.